La mastectomía bilateral subcutánea es un procedimiento quirúrgico que forma parte del proceso de afirmación de género para muchas personas transgénero o no binarias. Esta cirugía implica la extirpación de los tejidos mamarios y grasos en ambos pechos, con el objetivo de crear una apariencia más masculina o andrógina en hombres trans o personas no binarias. Es decir, para conseguir una masculinización del tórax. Sin embargo, como con cualquier cirugía, las cicatrices son una parte inevitable del proceso de recuperación. En este artículo, exploraremos los tipos de cicatrices en la mastectomía bilateral subcutánea, su importancia y cómo cuidarlas adecuadamente.

Cicatrices en la mastectomía trans

Las cicatrices son una parte natural de cualquier procedimiento quirúrgico, y la mastectomía bilateral subcutánea no es una excepción. Durante la cirugía, se hacen incisiones en la piel para acceder a los tejidos mamarios y extirparlos. Cuando estas incisiones sanan completamente aparecen unas cicatrices que, habitualmente y con el tiempo, se harán poco visibles. La apariencia y la ubicación de las cicatrices pueden variar según la técnica utilizada por el cirujano y las características individuales del paciente.

Dependiendo del tamaño de las mamas, su forma, la calidad de la piel y las necesidades de cada persona, se puede utilizar una técnica de mastectomía trans u otra. Y según la técnica utilizada serán los tipos de cicatrices de la mastectomía resultantes.

Técnica periareolar:

La técnica de la incisión periareolar en la mastectomía bilateral implica hacer una incisión circular alrededor de la areola para eliminar el tejido mamario. La piel restante se estira y se sutura en su lugar. Se suele llevar a cabo cuando las mamas son pequeñas y la piel es elástica. Esta técnica permite que las cicatrices sean mínimas y que queden disimuladas con el cambio de coloración de las areolas.

Técnica periareolar ampliada

Esta técnica de mastectomía trans se suele llevar a cabo en pacientes con unas mamas voluminosas. Básicamente consiste en realizar la incisión periareolar más otra que se amplía hacia la zona de la axila a través de las cuales se extrae el tejido glandular y el graso. En este caso, las cicatrices son más evidentes que en la técnica periareolar, aunque con el tiempo pueden quedar disimuladas por el vello.

Técnica de injerto libre

Cuando los senos son realmente voluminosas o cuando el paciente es considerado como un «gran» fumador, el cirujano suele optar por esta técnica que consiste en utilizar injertos de areola durante la cirugía. En este caso, las cicatrices de la mastectomía dependerán de las necesidades que cada paciente tenga durante el procedimiento.

Infografica mastectomía trans

Liposucción de la zona

A todas estas técnicas se les puede asociar una liposucción previa que permitiría disminuir el tamaño de las cicatrices y mejorar el contorno pectoral. Las cicatrices de la liposucción del tejido graso de las mamas son mínimas, de apenas unos pocos milímetros.

Evolución de la cicatriz en la mastectomía

Como en cualquier otra intervención quirúrgica, al principio, las cicatrices pueden ser de color rosado o rojo y tener una apariencia elevada o abultada. Con el tiempo, las cicatrices de la mastectomía tienden a suavizarse, aplanarse y desvanecerse, aunque este proceso puede llevar varios meses de evolución.

Es importante tener en cuenta que la forma en que las cicatrices sanen y evolucionen puede variar de persona a persona, y depende de muchos factores, como la genética, la edad, la salud, si son fumadoras o no, su exposición al sol, etc. así como los cuidados posteriores a la cirugía.

Sin embargo, hay algunas pautas generales que se pueden seguir para cuidar adecuadamente las cicatrices en la mastectomía transgénero y promover una cicatrización óptima. En este enlace puedes ver resultados de la mastectomía transgénero.

cicatrices en la mastectomía

Cómo cuidar la cicatriz en la cirugía de mastectomía

El cuidado de las cicatrices en la mastectomía bilateral subcutánea comienza desde el momento mismo de la cirugía. Es importante seguir las instrucciones del cirujano en cuanto a los cuidados posteriores a la cirugía y el uso de cualquier medicamento recetado. Algunos de los consejos para cuidar la cicatriz de la mastectomía son:

    • Es habitual que se recomiende el uso de una prenda de compresión para proteger las incisiones, reducir la inflamación, así como para facilitar el modelaje y la adaptación de la piel al nuevo contorno. Por ello es importante usarla cuando y como se te indica.
    • Es fundamental mantener las incisiones limpias y secas para prevenir infecciones. Durante los primeros días después de la mastectomía y hasta, como mínimo, retirar los puntos de sutura, se recomendará no usar la toalla para secar las cicatrices. Es recomendable utilizar el secador de pelo siempre con aire frío.
    • Se debe evitar sumergirse en agua estancada, como piscinas o bañeras, durante las primeras semanas después de la cirugía.
    • Es importante también evitar la exposición directa al sol en la zona de las cicatrices, como mínimo durante el primer año desde la mastectomía. Pues la radiación ultravioleta puede causar cambios en la pigmentación de la piel y retrasar la cicatrización.
    • Es importante seguir una buena alimentación y mantenerse hidratado para promover la cicatrización de las incisiones. Una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales, especialmente vitamina C y proteínas, puede ayudar a acelerar la recuperación y promover la formación de colágeno en la piel, lo cual es importante para la cicatrización.
    • Es fundamental evitar fumar y el consumo de alcohol durante el proceso de recuperación de la cirugía. El tabaco es muy pernicioso para una correcta cicatrización y el alcohol puede retrasar la recuperación. Si es posible, se debe intentar dejar de fumar semanas antes de la cirugía y continuar sin hacerlo hasta que se consiga una buena cicatrización.
    • Es importante seguir las recomendaciones del cirujano en cuanto a la actividad física después de la mastectomía bilateral subcutánea. Durante las primeras semanas, es importante evitar levantar objetos pesados, hacer ejercicio intenso o realizar movimientos bruscos que puedan estirar las incisiones. Sin embargo, es importante mantenerse activo y moverse con cuidado para evitar la formación de tejido cicatricial excesivo.
    • Es fundamental realizar masajes suaves en la zona de las cicatrices una vez que el cirujano lo haya autorizado. Esto puede ayudar a suavizar las cicatrices y reducir la formación de tejido cicatricial grueso.
    • Se pueden utilizar productos recomendados por el equipo médico como el aceite de rosa mosqueta, cremas o parches que contribuyan a una buena cicatrización. Además, también es aconsejable, una vez el cirujano lo aconseje, masajear la zona con movimientos circulares suaves durante unos minutos al día.

Puedes conocer la experiencia de Samuel en su mastectomía transgénero en este vídeo.

Si tienes más dudas sobre los tipos de cicatrices en la mastectomía transgénero o sobre como cuidarlas después de la cirugía, pide una cita con el equipo de IM GENDER y te informaremos.